divendres, 7 de desembre del 2007

Diciembre loco


Esta semana no hay competición de cross por coincidir con el puente. La semana pasada por motivos laborales no pude participar en el Cross de Salt. Ya son dos semanas seguidas de parón coincidiendo con el inicio de diciembre.
Con el mes de diciembre la rutina desaparece para entrar en unas fechas de locura colectiva y consumismo. Se inicia con el puente de la purísima o la constitución y se va más allá de diciembre, pasado reyes. Es increíble como nos transformamos; comenzamos colocando el árbol de Navidad con su correspondiente ornamentación. Luego se empieza a pensar dónde vamos a ir el día de Navidad y el de Año Nuevo, y por supuesto qué vamos a comer esos días. Luego los regalos, éste para mama, éste para papa y ¡cómo no! los niños se llevan la palma en este apartado, ellos que están como ajenos a esta locura se los encuentran bajo el árbol como por arte de magia, o se creen que un tronco de un árbol disfrazado con un gorro, ojos, nariz y una barba hecha de algodón, les cagará los regalos que quieren, sólo dándole con un palo y cantando una canción.
La preparación de viajes para ver a la familia y pasar unos días todos juntos es otro de los principales asuntos a tratar estos días.
Otro aspecto es lo de las cenas y comidas que se hacen por el trabajo, los amigos, etc, etc... se suelen hacer entre semana pues los fines de semana ya se encuentran al máximo de saturación.
La lotería pone su toque de ilusión en las familias, todos se envían decimos y participaciones con la esperanza de que a uno le resuelva algún que otro apuro.
Las felicitaciones navideñas te llevan una parte del tiempo que te queda, para buscar direcciones, comprar sobres y sellos y dedicar un rato al envío de un deseo, a gente que aprecias y no ves diariamente.
Las compras son lo que más tiempo y dinero necesitan, hay que comprar regalos para todos y la comida de esas celebraciones y algún detalle para alguien que te ayudó en su día y quieres corresponderle en gratitud.
Las calles se iluminan y se ambientan con melódicas canciones navideñas. Las personas se mueven de un lado para otro cargados de paquetes y lotes de navidad.
Cabalgatas de reyes, campamentos reales, caramelos, cartas, carbón, juguetes, sonrisas e ilusión.
Seguro que me dejo cosas pero todo ello es la Navidad.
Estas dos semanas de parón en las competiciones me han perjudicado bastante en mi rutina de entrenamientos pero es lo que hay. Hasta el 7 de enero estaremos así.

1 comentari:

Anònim ha dit...

Espero que el éxito de Marta en el cros, que anuncia la prensa te haya compensado de tu falta de actividad.
De cualquier forma, espero que disfrutes de lo que realmente importa. Cuando se quita tanta cáscara y ves los ojitos de tus hijos, se olvidan todas las molestias que ocasionan estas fechas. Estas semanas en lugar de correr, te toca sembrar imágenes y recuerdos que durarán en ellos para siempre. Esperamos ser testigos en parte. Besos.Maleli